Pampa y Ardi, creadores de la agencia creativa POGO
Pampa y Adrián “Ardi” son los creadores del estudio creativo POGO. Se conocieron en una fiesta de una agencia cuando él cambió la canción que sonaba para poner Pogo de Digitalisim y ella se acercó a decirle que iba a poner esa misma canción. Así arrancó su relación. A la semana ya salían, a los dos meses se mudaron juntos y a los cuatro meses estaban armando POGO que ya tiene diez años.
Saturados del funcionamiento de las agencias grandes en las que trabajaban, y con la necesidad de generar un espacio propio que les cope para trabajar, crearon su propio emprendimiento.
‘Estábamos un poco conflictuados porque no queríamos mostrar trabajos de la agencia en la que habíamos trabajado porque no eran nuestros del todo. Teníamos que crear un portfolio de cero’, explica Ardi. Ahí surgió la idea de hacer una revista digital llamada Soko. Armaron el primer número con fotógrafos de afuera. Ya para la segunda entrega muchos fotógrafos argentinos querían participar. ‘Los fotógrafos de acá empezaron a tener otro cuidado en sus imágenes y nos llevaron para trabajar con ellos para marcas’, admite Pampa.
Empezaron trabajando con Jazmín Chebar para renovar su imagen y sus buenos resultados hicieron que hoy, después de ocho años, sigan trabajando con ellos. 10 años post nacimiento de POGO, los chicos trabajan con marcas como Caro Cuore y Levis, realizan la producción general del BAF, la dirección de arte y producción del Lollapalooza y el arte para varios músicos y artistas.
La agencia creció mucho durante los primeros 5 años, había adquirido un volumen y ritmo de trabajo vertiginoso que, con la llegada de Vicente, su hijo, quedó en evidencia que no podía seguir siendo así. Decidieron barajar y dar de nuevo: achicar la estructura, trabajar por proyecto y estar presentes en el 360.
¿Su puerta de entrada a la moda fue Jazmín Chebar?
P: Sí, cuando fuimos a Jazmín, que es una marca muy mirada en lo que hace, se volvió todo una pelota. Fue un efecto dominó que nos cambió mucho el formato de trabajo, porque Claudio Drescher, socio de Jazmín, nos enseñó a trabajar en el mundo de la moda. Y dos años después conocimos Diego Finkelstein, que nos enseñó muchísimo sobre cómo manejarnos en el mundo de la música. Tenemos la suerte de trabajar para los dos mejores líderes de la música y moda en nuestro país.
A: Jazmín Chebar nos da mucha libertad. Claudio fue el primero que nos dijo: ‘Yo no quiero que ustedes dos diseñen, quiero que se sienten y piensen qué cosas se pueden hacer con la marca y ver un año para adelante’. Nos costó mucho, porque éramos muy detallistas.
P: En algún punto es un visionario, porque el diseño no es lo que era hace diez años. Hoy en día se democratizó un montón y la valoración del proyecto pasa por otro lado. Trabajamos con muchas marcas de moda y lo bueno de Jazmín es que tiene el presupuesto para la idea.
¿Cómo conocieron a Diego Finkelstein de DF Entretainment y a Claudio de Jazmín Chebar?
P: Los conocimos laburando.
A: Nos llevamos muy bien con los dueños, nos entendemos muy bien más allá de los roces del día a día. Así con todas las marcas. Al entenderte con el dueño después es más fácil trabajar en equipo.
¿Cómo pensaron toda la estética en la vuelta de Illya Kuryaki and the Valderramas?
P: Fue tremendo porque de chicos éramos re fans. Estuvo buenísimo. Hicimos toda la imagen nueva a partir de Chances y quedamos re amigos.
A: Habíamos pensado esto del peso del IKV anterior y armamos todo el monograma, tipografía, sello y la marca y se la tatuaron muchísimos fans. Nos metimos en otro rubro que era parecido a la moda. Lo del álbum está buenísimo porque estás dando forma a algo que ya está trabajado en este caso la música, en la moda es el diseñador y vos le tenés que dar forma a eso.
¿Sienten que les abrió puertas laburar en un festival como el Lolla?
P: Sí, pero más nos abrió la cabeza.
A: Ya estamos trabajando para el del año que viene. Siempre terminamos muy cansados y pasa un mes y ya estamos trabajando en el próximo.
¿Desde el momento cero tenían en mente hacer lo que hacen ahora?
P: Sí.
A: Yo no (risas).
P: Tuvimos mucha suerte y hay que estar agradecido. Queríamos hacer música y moda y es lo que hacemos.
A: Sí, eso sí, pero quizás estaba enfocado más desde lo gráfico. Tuvimos muchas etapas, pero en realidad son los clientes los que te van formando. Tuvimos una etapa muy comercial y ahora estamos volviendo y encontrando el equilibrio.
P: Respondiendo a tu pregunta… sí, hicimos todo lo que queríamos hacer.
A: Sí, pero nunca imaginamos terminar haciendo videos, nunca estuvo en nuestro plan ser productores y lo somos del BAF.
¿Qué características elegirían para describir POGO?
A: Colorido, con mucha vida, amorfo porque fuimos creciendo y mutando, no sé si en cinco años vamos a seguir siendo una agencia.
¿En qué momento sienten que explotó su laburo?
A: Hay momentos me parece, no un solo momento. En moda cuando hacés una campaña que hace ruido es un momento. El último Lolla, Levis también, hacer cosas más regionales nos abrió la cabeza.
¿Por qué se llaman POGO?
P: Odio esta pregunta (risas).
A: En esta fiesta que nos conocimos, yo me paré a poner una canción que era Pogo de Digitalism y ella se acercó y me dijo que iba a poner el mismo tema. Después, cuando pensamos un nombre pensamos en Pogo porque tiene un significado tanto en nuestro país como para nosotros.
Si tuvieran que definir en una línea lo que hace POGO, ¿qué dirían?
P: De todo.
A: Dirección creativa, dirección de arte y cada vez más producción. Nos ven como una productora y recién lo estamos procesando porque en realidad somos una agencia.
¿Cómo se mantiene un estilo con la variedad de clientes?
P: Te soy sincera, no sé cómo hacemos, pero está. Vos ves un proyecto y te das cuenta si lo hicimos nosotros o no, quizás me equivoco pero siento que siempre hay algo que une una cosa con la otra.
A: La forma de encarar los proyectos. Jazmín Chebar está lleno de estampas, de color, Lollapalooza también, los proyectos que vienen a nosotros quieren eso. Nunca nos piden algo minimalista, o sí, y lo hacemos pero pasa desapercibido.
P: Tenemos la capacidad de hacerlo, pero quizás sea un trabajo no tan personal.
¿Cómo influenció su hijo en su trabajo?
P: Nos cambió la cabeza. Tuvimos a Vicente y cambiamos de oficina.
A: Nos achicamos mucho, fue duro pero viéndolo a distancia no podía ser de otra manera. Fue un año en el que dejamos un espacio vacío, disponible. Y veíamos que crecían otros, algo natural, si uno se baja sube otro, pero después volvimos con toda. Si hacés las cosas bien, a la larga te va a ir bien. Aunque en su momento estuvimos asustados.
P: Cambiamos la estructura que no nos hacía felices, eso hizo que cuando mudamos la oficina a nuestra casa se creó un ambiente familiar que ahora ya es nuestra forma de trabajar. Nos enfocamos en hacer esto y esto, no en hacer todo y ver qué de eso sale bien.
A: Sacamos roles que eran puramente burocráticos y nos resultó.
¿Qué les gusta más, arrancar desde cero con una marca o hacer la comunicación de una con una identidad ya definida?
A: Son las dos cosas interesantes.
P: En el caso de Jazmín entramos para modernizarla, y ver el laburo después de tanto tiempo, está buenísimo. Caro Cuore y el Lolla también, nacer y crecer. Siempre terminamos llorando el último día pensando: en qué momento entramos en todo esto.
¿Algo que los haya flasheado últimamente?
P: Paulo Londra y todo ese fenómeno. Estoy tratando de entender a las nuevas generaciones. J Balvin, un poco eso, qué está sucediendo a nivel global.
A: Sí, estamos muy en esa.
¿Cuál es su mayor sueño?
A: Cuando arrancamos teníamos en un cuadernito todas las marcas con las que queríamos trabajar y por suerte se fueron cumpliendo.
P: Excepto una, pero no la voy a decir.
A: Quizás laburar con algún artista de afuera, algo global.
Pampa: “Tenemos la suerte de trabajar para los dos mejores líderes de la música y moda en nuestro país”
Trabajo del que estén más orgullosos
P: Chances de Illya, el Lolla, Caro Cuore y lo que venimos haciendo con Jazmín Chebar.
Alguno del que no estén tan orgullosos
A: Varios (risas).
P: Nos volvimos exigentes con el tiempo, entonces si vemos que algo no va con nosotros no lo tomamos.
A: Aprendimos a decir que no. Antes decíamos siempre que sí. Quizás por miedo no nos animábamos a decir que no.
¿Cuál es su alimento creativo?
A: Los viajes y la música.
P: Los chicos que trabajan con nosotros.
¿Un disco?
A: Igor de Tyler the Creator.
¿Cómo se complementan?
P: Tardamos muchos años en encontrar un equilibrio y la manera exacta, pero no nos imaginamos vivir de otra manera, y lo disfrutamos. Tratamos de no pisarnos y respetarnos en las decisiones de cada uno.
¿Qué hace cada uno?
A: Dirección general.
P: Dirección creativa.
A: Fue mutando, todos hacemos un poco de todo.
¿Qué películas o directores les gustan?
P: De chica me gustaba mucho David Lynch.
A: Me gusta Spielberg. Me copa el nivel de producción que tiene. Me intriga lo grande.
¿Qué quería hacer cada uno de chico cuando fuera grande?
P: Yo no lo tenía claro pero quería esto. Tenía una obsesión con las campañas y las modelos. Estudié tres años Publicidad y dos años de Diseño Gráfico, no terminé nada, lo que aprendí de diseño lo aprendí de Ardi y lo creativo fue desarrollo personal.
A: Yo quería hacer arte, después me metí en diseño industrial por mis viejos, pero no me gustaba, aunque me sirvió. Hice medio año de Ingeniería y dejé, me puse a hacer Diseño Gráfico y empecé a laburar.
¿Qué les divierte y qué les aburre?
P: Mi hijo me divierte muchísimo, me divierte verlo crecer, sus interpretaciones son un divague. Me aburre no hacer nada. Me divierte hacer cosas de niños y reinterpretarlas ahora de grande.
¿Les gusta mirar laburos de otras agencias?
P: Vemos de todo, de afuera y de acá.
Cuando miran a un artista, ¿les gusta averiguar la producción y el detrás?
P: Sí, todo.
Vintage o nuevo
A: Lo nuevo.
Analógico o digital
P: Analógico.
Tomarían un café con…
P: J Balvin (risas).
A: Me gusta más el lado de la producción. Fabien Baron que es una mezcla como nosotros: creativo y arte. En los 90 armó la imagen de Calvin Klein y Madonna.
Un mito que haya que derribar
A: Que una agencia chica no puede agarrar una marca grande. El mito de la agencia grande ya fue.
Mejor cumplido que les hayan dado sobre su trabajo
P: Entrar en el radar de Fabien Baron fue muy fuerte. Me empezó a seguir en Instagram y nos mandó ese libro con una carta. Cada vez que voy a nueva York me escribe. También cuando llamás a alguien para trabajar y te dice ‘che soy fanático de lo que hacen’.
A: Cuando fuimos a Chile y algunas personas tenían re identificado lo que hacemos, eso está buenísimo.
¿Qué les gusta generar en las personas que ven lo que hacen?
P: El impacto, la recordación, hacemos evaluaciones sobre eso. Si me parece lindo un trabajo, pero no recuerdo nada puntual es porque que le faltó algo.
¿Algún tip para los bloqueos creativos?
P: Nos destrabamosos entre nosotros, nos pasamos mucho las cosas.
A: Ningún proyecto es del todo de uno, todo es de todos, es muy pasamanos.
¿Cómo se puede ser original en un mundo creativo donde parece que todo ya está inventado?
A: Un poco lo del pasamanos de proyectos lo lleva a que cualquier idea vaya para otro lado y termine siendo original. Somos muy pesados con lo original. Es un buen método para que no quede un proyecto en una sola cabeza.
Un buen consejo que les hayan dado…
A: Claudio siempre fue nuestro padrino. Desde el primer momento nos dijo: ‘Ustedes tienen que ser pocos y valorar su laburo’.
¿Qué los tiene entusiasmado actualmente?
P: Por suerte tenemos la habilidad de no desmotivarnos con las producciones. Cuando crees que llegaste a un límite tenés que hacer otra cosa. Como con el Lolla que viene ahora. Tenemos que ver siempre cómo hacer algo más grande de lo que ya hicimos.
A: Da cagaso pero después por h o por b algo nos termina inspirando.
P: Por suerte tenemos proyectos que nos inspiran y que crecen.
¿Qué es para ustedes pegarla?
P: Es un logro personal. Nosotros queremos posicionar a la Argentina afuera. Que no significa viajar y vivir arriba de un avión, queremos encontrar la manera de trabajar globalmente sin tener que irnos afuera.
A: Es muy amplio, pero nos gusta los que llevan lo latino al mundo. Nos encantaría que se valore el trabajo que hay acá.