Agustina de Alba. Sommelier.

Otra YUKI de iniciación temprana. A los 15 años viaja con su padre a Mendoza. Descubre el vino, se enamora rotundamente, y promete volver como los amores de verano. Pero este amor era posta, era perenne.

Después de terminar el colegio, trabaja en una colonia de vacaciones para ahorrar lo que un pasaje a Mendoza en colectivo ($400 para ser exactos), una vez allá consigue trabajo de camarera en un bar, y se queda 3 meses.

Se propuso algo, lo consiguió y estaba ahí, sola, con todo el laburo y el desafío por delante:

“Subida al colectivo camino al Valle Grande donde estaba el bar, lloraba de felicidad, era una felicidad diferente, que nunca había sentido, me vibraba el cuerpo, a partir de ahí me sentí libre, difícil de explicar.”

A los 20 años fue elegida ‘Mejor Sommelier Argentina’, a los 24 otra vez, sumando ‘Mejor Sommelier de las Américas’. Laburante incansable, que orgullo carajo. Es argentina y es YUKI.

Hace un año y medio comenzó una nueva etapa en la vida de Agustina, dejó su lugar como sommelier en Aramburu Restaurant para, junto con la guía de su ‘coach’ Euge, desarrollar sus proyectos propios: creó su propio vino ‘Blanc de Alba’  junto a Juampi Michelini (92 puntos Parker en cosecha 2014) , asesora restaurants, realiza capacitaciones, es creadora del ciclo ‘Women & Wine’, docente en la Escuela Argentina de Sommeliers y está trabajando en la creación de su primer libro. (Gracias por hacerte tiempo para esta entrevista!)

 

 

 

Agustina de Alba es sinónimo de: movimiento, necesito moverme y crear todo el tiempo para no aburrirme.

Grandes Maestros: FIONA MORRISON, la dueña de Ch Le Pin uno de los vinos más prestigiosos del mundo, ‘ser humilde y generoso’. Agustina hacía temporada en Los Notros (Calafate), le recomendó un vino. Como amor a primera vista:

“le conté que me estaba entrenando para participar del concurso mejor sommelier de argentina 2008 y ella me dijo que si lo ganaba, me invitaba a Pomerol (Burdeos) a cosechar con ellos. Así que me puse a estudiar más que nunca, gané el concurso y a las 3 semanas me fui a visitarlos.”

PHIL CROZIER: Agustina viaja a Londres, sola y sin saber inglés. En su primer noche, conoce al dueño de GAUCHO UK, mega cadena de restaurants, y le ofrece trabajar como sommelier. A los dos días le presentan a su nuevo jefe: Phil. Agus cuenta como Phil le cambió la mirada sobre el mundo del vino, y como llegó a trabajar de traje y pelo atado tirante, con su protocolo y todo lo estudiado bajo el brazo.

“llegué a Gaucho y los Sommeliers eran los únicos del restaurant que se vestían como querían, charlaban con los comensales, recomendaban vinos de una manera impactante pero sin estructuras. Phil me agarró mi tercer día y me dijo, si te contratamos en Gaucho es porque queremos que seas vos, no quiero que en mi equipo sean todos iguales, por eso tenemos personalidades diferentes, asique sacate el traje, sacate la estructura. Quiero ver a Agustina. Me quedé helada, me enojé, le decía que no estaba de acuerdo….. y con el tiempo, entendí que tenía razón, y empecé a disfrutar todo el triple, a ser más yo.”

 

¿Cuál es tu fuerte? La comunicación oral, el pararme frente a un grupo y dar una charla, hacer radio, dar clases. Etc.

¿Mito derribado en el vino?  Que entender de vinos es difícil.

¿Un buen consejo  o tip que te hayan dado? Y quién te lo dio? Hace muchos años, una profesora mia, María Mendizabal me dijo que antes de tomar un vino tinto caliente o a temperatura ambiente, ella colocaba un hielo en la copa, lo giraba y lo sacaba para evitar que el vino se ague. Ese fue el mejor consejo.

¿Estado mental/emocional más frecuente? Entusiasmada.

¿Algo que te aburra soberanamente? Mirar series, me encantaría engancharme con alguna pero soy muy dispersa y termino con la cabeza en cualquier lado.

Te gustaría ser mas…. Reservada con la gente que no conozco.

¿Qué vino abriste en tu casa últimamente? Cara Sur Bonarda de Seba Zuccardi y Pancho Bugallo, de Barreal, San Juan.

¿Tomás cerveza? No.

¿Otras pasiones o hobbies? Estudiar teatro, tomo clases desde muy chica y me encanta. Y viajar.

¿Una canción que te haga bailar indefectiblemente? No me hace bailar pero si me emociona, y es Abismo de los IKV, de ahí surgio mi vino Blanc de Alba que creamos junto a Juampi.

¿Un TOC? Cada vez que cierro el auto, camino media cuadra y vuelvo porque siento que no puse la alarma, y obvio que siempre lo hago.

¿Una máxima propia o frase de cabecera? Nose si es una máxima pero de chica me enseñaron que en la vida no existen imposibles, que todo depende de uno y siempre creí en eso.

¿Una película, un libro, una comida? Las empanadas de mi abuela Virginia que son algo de otro mundo. Un libro “La batalla por el vino y el amor” de Alice Feiring, y una película, me pasa medio como las series, me cuesta ver una película completa.

¿Que superpoder te gustaría tener? Teletransportarme a diferentes partes del mundo.

¿3 características que hablen de vos? Sensible-graciosa-intensa.

¿Un pendiente? Dedicarme a la actuación.

¿Un pecado capital? Gula.

¿Una moda (ítem, costumbre, estilo)  que harias volver? Discman.

¿Una muletilla? Tengo un tema con las manos que no paro de moverlas cada vez que doy una charla o un taller.

¿Cómo te malcrías a vos misma? Haciendo lo que me gusta y disfrutando, de mis amigos, de mi familia, de salir a comer, de beber rico, de viajar, etc.

¿Qué fue lo último que te voló la cabeza? Cocina Sunae.

¿Algún colega o joven promesa que quieras mencionar? Si, mi querída Juliana Carrique, sommelier de Aramburu.

Derribando Mitos. Agustina de Alba Dixit.

Yo los primeros años de mi vida fui super académica, estudiaba muchísimo, e intentaba hacer todo a la perfección de lo que me enseñaban. Dedicaba horas y horas a memorizar regiones de vino del mundo entero, a decantar un vino, a entrenar el olfato para oler más, y en ese momento pensaba que ser mejor o peor pasaba por quién era más perfecto o quién se equivocaba menos en ese sentido. 

Pensaba que un sommelier, es un verdadero sommelier cuando trabaja en un restaurant todas las noches, y cata muchísimos vinos.  

Hace un año y medio, dejé Aramburu con la idea de dedicarme a la comunicación del vino, de acercarlo al consumidor, de sacar esa idea que para disfrutar del vino tenes que leerte una enciclopedia. 

Y ahí empecé a descubrir, que no existe UNA sola forma de ser sommelier, o UNA forma de apreciar un vino y empecé a encontrarme a mi, mi singularidad, como todos la tenemos pero hoy, en algún punto  siento que cada cosa que hago representa mi visión sobre el mundo del vino, ni la de un alumno/graduado perfecto, ni la mejor ni la peor, la mia.

Agustina nos recomienda etiquetas de vinos de entre $100-$300

*Zorzal Terror Único Malbec

*Cara Sur Bonarda

*Jijiji Malbec-Pinot noir

*Aprendiz Cabernet Franc

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