Alexis Zagdañski “Mi paz está en la acción, encuentro paz en el hacer.”

Alexis es de familia polaca. Sin ningún lazo previo a la gastronomía ni al cafetería, con mucha búsqueda y determinación por hacer, Alexis y su mujer supieron convertirse en su propio punto de partida. Alexis estudió Administración de Empresas Hoteleras y Gastronómicas sin estar del todo convencido. Tenía el prejuicio de que era ‘poca carrera’ comparada a las tradicionales y exigentes como  Medicina, Ingeniería y Abogacía que estudiaban la mayoría de sus amigos.

Supo desafiarse en el mundo gastronómico, aprendiendo, creciendo, volviéndose experto. Consiguió que lo contrataran de la cocina del Hotel Intercontinental sin ninguna experiencia previa, solo a base de actitud. En 2001 junto a algunos compañeros de la secundaria tuvo su primer impulso emprendedor: abrir un restaurant. Pero no terminó sucediendo y durante muchos años, Alexis tomó este hecho como cocarda de fracaso.

En los años siguientes, tuvo muchos trabajos en relación de dependencia, pero insistía esa necesidad de dirigir su propia batuta. Durante su experiencia en una empresa que vendía café tostado, fue entrenado para ser barista, y en esa capacitación fue que el mundo del café le partió la cabeza. Se volvió un apasionado experto que comunicaba el café con tal fervor que contagiaba su pasión, generaba adeptos. Se convirtió en fuerza de venta idónea para la empresa, y ahí pudo conocer el otro lado del negocio. Un buen día, habiendo llegado a su techo de crecimiento, e incentivado por su mujer, a quién conoció vendiendolé café, renunció para hacer lo propio. Viajaron y descubrieron el universo del ‘tueste de café’. Era una locura comprar las máquinas y abrirse una tostadora de café, pero lo hicieron. En 2012, abren Lab Tostadores de Café.

Empezaron a abastecer cafeterías con café de calidad, diseñando para cada una un perfil de tostado especial. Desde el momento cero, el foco estuvo en conseguir el mejor producto posible y en construir un concepto perdurable en el tiempo. Con responsabilidad y compromiso, día a día educan al consumidor, comunican el café, contagian la pasión.

“Lab es un templo de café. Si venís acá, abrite a lo que tengo para ofrecerte”.

En poco tiempo consiguieron grandes clientes, sacudiendo así el piso de los proveedores típicos pre existentes. Revolution Baby.

Alexis cuenta cómo empezó a sentir la necesidad de tener un lugar donde sus propios baristas pudieran hacer lucir su producto en su mejor versión, mostrar su cultura, su forma de hacer las cosas. Hicieron un ‘All in’ y en 2014 se convirtieron en los primeros tostadores de café en tener un local a la calle abriendo las puertas del primer LAB. Hoy ya son dos.

“La clave está en el consumidor. Si vos le das herramientas al consumidor para que sepa de café, va a poder exigir en las cafeterías el mejor café, y eso hace posible una demanda para tan buen producto.”

El camino del café es muy parecido al del chocolate. Por lo que a principios de este año inauguraron una nueva rama: Cacao Roasters. Tabletas de chocolate zarpado en calidad y sabor para vender en cafeterías, y chocolate por kilo para vender en gastronomía.

“Algo muy atractivo para mí de lo que hago, es que por más de que sea super de nicho, no tenés que ser experto para valorarlo y disfrutarlo. No es para unos pocos sino para cualquiera que lo quiera ver.”

¿Hora de acostada/levantada habitual? A las 11pm me acuesto y a las 7.30am tomó el primer café.

¿Un mito que hayas derribado? Cuando empecé en la gastronomía, el café era un gran mito. Lo tomaba con azúcar.

¿Un buen consejo que te hayan dado y quién te lo dio? “No pienses en tener tu casa propia. Pensá en generar una fuente de ingreso y eso como resultado te va a dar tu casa”. Me lo dio mi papá.

¿Algo que te gustaría que te regalen? Más que algo material, diría un momento…un asado y futbol con amigos.

¿Una frase que te repitas? ‘Lo que no te mata te fortalece’.

¿Con quién te sentarías a tomar un café? Con mi abuelo paterno que ya no está.

“El gran desafío es dejar que el proyecto tenga vida propia.”

¿Algo que te cause gracia aunque se repita mil veces? Mi hija.

¿Algo que te aburra soberanamente? El cliente que no entiende el concepto.

¿Un ritual? Mi rutina de todos los días. Levantarme, ir a Lab, y tomarme ahí el primer café. Y a la noche llegar y bañar a mi hija.

¿Cuál es tu especialidad en la cocina? Descubrí hace poco que me gusta mucho lo ácido, y que los sabores de la cocina polaca tiene mucho de ácidos… debe venir de ahí.

¿Qué buscás transmitir con lo que haces? Pasión por el producto y pasión por convencerte de hacer algo.

¿Qué le dirías a tu yo de 15 años? Le diría que todo llega, y que confíe en el camino que elija.

¿3 características que hablen de vos? Exigencia, pasión y pensante.

¿Un prejuicio que hayas tenido sobre vos mismo? Esto de que necesitaba seguir una carrera ‘importante’ para ser socialmente importante.

¿Cuándo te diste cuenta de que tenías algo groso entre manos? Cuando me planté diciendo que no daba máquinas en comodato y vendí café igual.

“El éxito es hacer algo que amás y que te permita vivir de eso.”

¿Cómo manejas la exigencia? Cada vez mejor…. Hace poco me dijeron algo muy bueno, y es que ‘Mi paz está en la acción’, encuentro paz en el hacer.

¿Una mente creativa que admires y por qué? La mía. Porque confío mucho en lo que creo y lo sigo.

¿Contra qué luchas? Contra fantasmas familiares. Quizás tiene que ver con algo de esta generación que corta el lazo y sigue su camino.

 

www.labcafe.com.ar